México: Esposas ricas, ¿políticos austeros?
A pesar de que los funcionarios y políticos declaran que carecen de propiedades, sus parejas se dan una vida de lujo
Andrés Manuel López Obrador, lider izquierdista. Crédito: EFE
MÉXICO – Las declaraciones patrimoniales, fiscales y de intereses que hasta ahora han presentado 639 funcionarios públicos ante el portal ciudadano www.tresdetres.mx revelan que existe un puñado de políticos austeros, incluso sin propiedades, con esposas ricas y ponderadas dueñas de joyas, arte, casas, terrenos y departamentos por todo el país.
Al menos en el papel.
De ese perfil que pone en duda la verdad de la información debido a la falta de congruencia entre el ingreso económico y bienes de los cónyuges (algunos ni siquiera trabajan) no escapa ningún partido.
Entre los más conocidos se encuentra el fundador del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, que en su declaración patrimonial afirma que no tiene nada pero su esposa Beatriz Gutiérrez, académica universitaria, cuenta con cuatro propiedades, una en la Ciudad de México, dos terrenos y un departamento en Puebla cuyo costo se desconoce.
Por el mismo camino, el priista Héctor Astudillo, gobernador del estado de Guerrero, asegura que sigue como Dios lo trajo al mundo, es decir, con cero patrimonio, pero su esposa, quien es una funcionaria media en el gobierno actual, es dueña de dos edificios, una casa, cuatro departamentos y tres predios urbanos.
Francisco Nava, diputado del Partido de la Revolución Democrática (PRD), declaró cuatro cuentas de banco, un automóvil, menaje de casa y joyas, mientras su mujer es dueña de 15 propiedades en San Luis Potosí, donde vive el matrimonio.
Desde la perspectiva de género, la gobernadora de Sonora Claudia Pavlovich, del Partido Acción Nacional (PAN) asegura que sólo tienen dos locales comerciales a favor de su matrimonio en tanto su marido posee un local comercial, una casa y un rancho en México así como un departamento en Scottsdale, Arizona.
La diputada Susana Corella, del Partido de la Revolución Democrática (PRD) maneja para ella sólo una cuenta bancaria y propiedades, pero su esposo posee una casa y un departamento en Sonora, cuatro vehículos en la capital mexicana y una embarcación en Estados Unidos.
La lista en larga y los ejemplos similares sin contar que el congreso eliminó de la iniciativa de ley la propuesta de que cualquier consanguíneo hasta cuarto grado debería presentar su declaración de intereses. Así los padres, tíos, sobrinos y primos de políticos quedaron exentos de rendir cuentas a pesar de casos como el de la lideresa del sindicato de maestros, presa por enriquecimiento ilícito Elba Esther Gordillo que usaba a su madre para abrir cuentas y empresas fantasmas en el extranjero y hoy tiene nietos multimillonarios.
Además los políticos no quedaron obligados a presentarla ante el Sistema Nacional Anticorrupción porque los partidos votaron en contra cuando se diseñó la ley.
“El asunto ahora es de presión social: si un político quiere ser competitivo debe hacer su declaración 3de3”, destaca el analista político Fernando Dworak. “Ahora los funcionarios lo está haciendo en la página ciudadana pero lo que sigue es hacer sus declaraciones, si así lo decide, del Sistema Nacional Anticorrupción y éste deberá encargarse de cotejar la información”.
