Luis Suárez confiesa lo que sintió cuando llegó al Barcelona

Luis Suárez fue de menor a mayor en Barcelona, aunque con un crecimiento acelerado. Llegó después del escándalo en el Mundial de Brasil, del que fue expulsado por morder al defensor italiano Chiellini. Tuvo que esperar alguno meses para poder debutar oficialmente, mientras las figuras de Lionel Messi y Neymar lo ponían en un tercer plano.

Con el correr de los partidos, su talento le fue asegurando un papel fundamental en una delantera letal, terminando su primera temporada en club con un gol clave en la final de la Champions League. Hoy, en su segundo año en el club catalán, es el máximo goleador de Europa (43 goles), por delante de Cristiano Ronaldo (41) y ‘la Pulga’ (37). En uno de los mejores momentos de su carrera, el delantero confesó quién fue la primera persona que dudó de sus capacidades para vestir la camiseta blaugrana: él mismo.

En una entrevista con Onze Helden’ (‘Nuestros héroes) de la cadena holandesa KPN, Suárez contó: “No me imaginaba ser el N° 9 del Barça. Uno siempre sueña con jugar con los mejores del mundo y hoy lo estoy haciendo con Messi, con Neymar, Iniesta, Busquets…”. Agregó: “La verdad es que pensaba que no tenía calidad para jugar aquí, yo era más de espacios largos…”. Y sentenció: “Se trata de acostumbrarte y de adaptarte al juego corto, al tiki-taka, al compañero, a que conozcan tu juego, tus movimientos… El haber encajado bien en el equipo me deja muy contento”.

Su encendido carácter le jugó en contra en varias oportunidades, en especial durante la Copa del Mundo, en la que su reacción y sus antecedentes lo terminaron condenando (además de una FIFA poco lógica en sus decisiones). ¿Cómo vivieron en su familia esas actitudes? “Es positivo que los niños (sus hijos Delfina y Benjamín) se den cuenta de que su papá no es perfecto. Me hace daño pensar que vean el porqué de mi sanción, pero ya pedí perdón en su momento”, reconoció.

“Siempre tuve presión en los equipos que estuve, yo mismo me la ponía. Cuando el equipo no ganaba pensaba que era yo (el culpable). Hoy en día me la he quitado, y eso me deja jugar más tranquilo y divertirme más”, confesó Suárez, quien también destacó la importancia de su psicólogo en el cambio de actitud. “Todo el mundo sabe que he hablado con un psicólogo que me ha ayudado muchísimo, no solamente en el fútbol. Me ha ayudado a pensar más las cosas y no guardarme las cosas. No discutir, sino debatir una situación y hacerme entender”.

Por otra parte, se refirió a uno de los detalles de la preparación de Barcelona que sigue sorprendiendo a muchos en España: el equipo no se concentra antes de los partidos. “La gente se sorprende cuando no hacemos concentraciones antes de un partido, sobre todo en partidos como contra el Madrid. Cuando es de visitantes, viajamos la misma mañana. Estamos en casa, con la familia. Cuando jugamos en casa tenemos que estar en el estadio sólo una hora y media antes“, explicó el delantero. “Es la forma de hacer que no pensemos demasiado antes del partido. Luis Enrique ha sido muy importante por la confianza que me ha dado desde que he venido”.

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