San Bernardino: “Sujetos estaban equipados para llevar a cabo otro ataque”

En el hogar de los sospechosos se encontró 12 bombas caseras y cientas de herramientas para elaborar más bombas

Syed Rizwan Farook, de 28 años, es uno de los sospechosos de perpetrar el ataque contra residentes de San Bernardino.

Syed Rizwan Farook, de 28 años, es uno de los sospechosos de perpetrar el ataque contra residentes de San Bernardino. Crédito: Suministrada

Doce artefactos explosivos, miles de municiones y armas de grueso calibre que poseían los sospechosos de la masacre de San Bernardino, que dejó un saldo de 16 muertos —14 víctimas y dos sospechosos- y 21 heridos —cifra que aumentó de 17-, sugieren que éstos planeaban realizar otros ataques en la región, dijeron hoy las autoridades.

“Si ves el obvio nivel de planeación, la cantidad de armamento que tenían, las armas, las municiones, hay obviamente una misión aquí, sabemos eso. No sabemos por qué”, dijo David Bowdich, director asistente de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) en Los Ángeles, en una conferencia esta mañana.

La dependencia no ha descartado la hipótesis de que se trató de un atentado terrorista perpetrado presuntamente Syed Rizwan Farook, de 28 años y nacido en Illinois, y su esposa Tashfeen Malik, de 27 y de origen paquistaní. Ambos ingresaron juntos al país en julio de 2014.

“Nos llevará tiempo saber esa respuesta”, dijo el funcionario, quien recalcó que aún continúa el análisis de la evidencia encontrada en distintos lugares.

El FBI considera que hubo cierto “nivel de sofisticación” en la elaboración de las bombas.

Las autoridades no han encontrado evidencia de que los atacantes pretendían suicidarse.

Después de un cauteloso cateo en la vivienda de los supuestos autores del tiroteo en el Inland Regional Center ocurrido este miércoles por la mañana, las autoridades aseguraron doce artefactos explosivos y miles de municiones para pistolas y rifles que se encontraban en la vivienda de la pareja.

“Claramente estaban equipados pata hacer otro ataque”, dijo Jarrod Burguan, jefe de la Policía de San Bernardino, quien mencionó que los agresores habrían efectuado de 65 a 75 disparos en un salón del Inland Regional Center, donde se realizaba un banquete navideño.

La teoría de que la masacre obedeció a una disputa laboral se ha empezado a diluir.

“Aparentemente hubo un nivel de plan para hacer eso. Nadie sólo deja una fiesta enojado y regresa con ese tipo de plan elaborado y hace eso”, dijo Burguan.

La Policía de San Bernardino descarta que haya cómplices que intenten realizar otros ataques.

“Creemos que la gente involucrada en el tiroteo son los que murieron en la escena [el miércoles por la tarde, tras una persecución y un tiroteo con una veintena de policías en una calle de San Bernardino] y no tenemos información creíble de que hay una amenaza inmediata para nadie en la región”, dijo Burjuan.

Se informó que durante el tiroteo de ayer con los sospechosos, resultaron heridos dos agentes del orden pero no de gravedad. Al menos uno de ellos será dado de alta hoy. La Policía cree que durante la persecución Malik disparó a los agentes desde la parte trasera del vehículo, mientras que Farook conducía y participaba en el intercambio de balas.

Las autoridades indicaron que hoy serán publicados los nombres de las 14 víctimas.

El condado de San Bernardino informó que interrumpió las operaciones de las oficinas y departamentos “no esenciales” por seguridad y duelo.

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